Ninguna luz de barco en el horizonte, solo una blanca de popa de un cerealero que pasó hace un rato por el Club, río arriba y las otras son luces de boyas y algún muelle.
Bajo al mínimo la intensidad del display del GPS para evitar encandilarme y de esa manera tener una buena visión del río. La linterna frontal solo la prendemos de vez en cuando, para buscar algún obstáculo, y nos mantenemos navegando solo con la luz de popa de los kayaks.
Con el GPS voy controlando el rumbo de la navegación y trato de apuntar a la boca del Carabelas haciendo una gran diagonal desde el Club, para no pasarme por la corriente ni estar demasiado tiempo en el centro del canal navegable.
Ya en el Carabelas Grande estamos mas relajados, solo nos preocupamos por no llevarnos puesto ningún muelle, ni ningún camalote a la deriva que hay varios.
Definitivamente es mejor navegar con solo la luz ambiente y no usar la frontal hacia adelante. Esta ilumina la proa del kayak y genera reflejos en la pala y el agua, lo cual hace disminuir el campo visual del conjunto.
Cada tanto un solo flash de luz para encontrar algún punto dudoso y el resto lo resolvemos con la ayuda del reflejo de las estrellas sobre la superficie del río.
Ya adentrado en el Carabelas apago totalmente el display del GPS, pues estando al mínimo igual encandilaba y desorientaba en la búsqueda del horizonte navegable.
Hay bastante camalote a flote, por momentos prendo la frontal y veo que me dirijo directamente a pequeños islotes de camalotes que avanzan de vuelta encontrada impulsados por la corriente del río que está bajando levemente.
Pasamos "Mato Grosso" y casi sin darnos cuenta estamos llegando al "Zuift" y "Reina Mora" cascos hundidos que están el la boca del canal 5.
El Canal 5 esta a favor, nuestra velocidad en la noche y tomando todas las precauciones para no colisionar con nada, es de 6 km/h. En el Carabelas la velocidad era menor, alrededor de 5 km/h a causa de la corriente en bajante de este.
Al acercarnos al cruce con el "La Serna" (5 bocas) la velocidad de avance ronda los 7 km/h y la noche sigue tan cerrada como al principio,
Con cuidado ingresamos al Canal 4 manteniendo nuestra izquierda y mirando seguido para atrás, pues se divisan dos luces (verde y roja) que delatan la presencia de un arenero que se nos acerca desde el canal La Serna subiendo por el Canal 4 con rumbo al Paraná Miní.
Marcamos nuestra posición con las linternas frontales, y ya seguros de que todos nos vimos, seguimos navegación pegados a la costa, esperando el paso del barco que avanza por el medio del canal.
Cuando nos sobrepasa por estribor a unos 50 metros de distancia logro leer el nombre sobre la proa, es el "Barranqueras", dejamos que se aleje un poco y luego de mirar atentamente a nuestra popa, buscando alguna otra luz, no vemos mas nada ni se escucha otro motor, por lo tanto cruzamos a la otra margen, la izquierda del río (nuestra derecha ya que estamos río arriba).
Llegamos luego de un rato al Paraná Miní. El arenero ya no se ve ni se escucha, pero luego de entrar al Mini, divisamos su luz de popa en el medio del canal rumbo al Guazú.
Tenemos las luces y el pequeño faro de "Aulicino" a la vista, y cuando pasamos frente a su playa de arena toda iluminada y con reposeras en la costa, nos tentamos y desembarcamos para descansar unos minutos y tomar un poco de café caliente del termo y unas galletitas.
Son las 04.15 de la madrugada del Sábado nos quedamos 20 minutos lagarteando y seguimos viaje por el Miní en busca del canal Arana.
Ingresamos al Arana y una vez en la vida, no está en contra. Tampoco diremos que está a favor, pero por lo menos no nos frena y deja que avanzamos a buena velocidad.
Cuando pasamos la mitad del Arana, se ve una luz en el horizonte que parece inalcanzable, esta a nuestra proa, por donde debemos pasar, pero hace mas de media hora que la vemos y nunca llegamos. Por fin llegamos, es la luz de un muelle y no se si es por el cansancio, o la falta de sueño, pero por momentos parecía que se apagaba, para volver a verse al rato.
Ya no hace falta mas luz ni de popa ni de linterna frontal, esta aclarando y todo se distingue con facilidad, después de un rato estamos llegando al Barca Grande y nos disponemos a cruzarlo, para ingresar al Correntoso.
Será que hoy el Correntoso no quiso hacer honor a su nombre, está bastante calmadito y no corre como en otras ocasiones, tampoco el Barca Grande tiene corriente, ya que el cruce no marco ninguna deriva en el GPS
Ya ingresados en el Correntoso, somos testigos de un amanecer entre nubes, el cielo durante la noche se mantuvo permanentemente estrellado y sin luna, solo una pequeña luna en cuarto menguante se asomó por el Este, cuando estábamos en la última parte del Arana.
Al fondo a nuestra proa se ve una linea de árboles muy alta, que marca la boca del Arroyo Pantanoso, y mas a la izquierda y al fondo un "pehuén" que sobresale del resto de los árboles, marcando la bifurcación del Correntoso y el Manzano de Medina.
Ingresamos a nuestra derecha por la continuación del Correntoso, y notamos el incremento del viento, lo que nos da una idea de lo que vendrá, al llegar al Río de la Plata.
Antes de llegar a la desembocadura del Correntoso, desembarcamos en un muelle abandonado para desayunar. Dedicamos una hora para comer galletitas con dulce de leche y terminar el cafe caliente del termo, luego de lo cual ingresamos nuevamente a los kayaks, pero ahora con los cobrecokpit colocados, suponiendo que el cruce va a estar movido.
Estamos en la boca de Correntoso, el Río de la Plata en este punto esta bastante movido, tenemos viento Norte de unos 20 nudos, todo el Plata es corderitos y se escucha un fuerte ruido a mar.
Encaramos con ola casi de frente al principio y pinchamos permanentemente las crestas espumosas, hasta llegar al banco de juncos que nos separa del Canal Martin Garcia.
Paramos unos minutos junto a unos arboles que están en la punta sur del banco de juncos y barro, dejamos pasar un barco cerealero de gran porte que viene subiendo por el canal y observamos la marejada que rompe contra el bulbo de su proa.
Lindas olitas nos esperan en el medio del canal, nos acomodamos bién en los kayaks, verificamos el rumbo y encaramos el cruce. Acordamos con Clary hacer la navegación bién cerca un bote del otro, por si hay que recuperar algún bote por vuelco.
Todo trascurre con normalidad, cada ola rompe indefectiblemente sobre cubierta y en el medio del canal, la deriva por correinte y viento es muy notable.
Por momentos navegamos casi con rumbo Norte para compensar la deriva y poder mantener la derrota. Es increible pero apuntando al norte, vemos el GPS y nos indica que estamos derivando al Este de una manera tan fuerte que avanzamos de costado.
Ya dejamos las dos boyas a nuestro babor y al salir del cauce del Canal Martin Garcia, disminuye la deriva inmediatamente.
Debido al abundante viento y correntada, estamos algo fuera de ruta. Entre nosotros y Dos Hermanas
tenemos un banco de juncos que optamos por pasar al Norte. Son los últimos bajos de junco y arena que arrancan al Sur del Islote El Maton y se plolongan por mas de 3 km al Sur, impidiendo de esa manera una navegación limpia con poca agua.
Con mucho viento de frente poca agua y ola rompiendo, se complicó bastante llegar hasta estos juncos.
Al llegar bajamos de los botes en un piso de arena blanca y los acomodamos por un rato entre los juncales para caminar e investigar por donde permitian el paso en forma segura.
Luego de caminar (sin los botes) al Norte del juncal encotramos un paso, el cual decidimos encarar con los botes abarloados y con las dos velas para poder avanzar con el viento totalmnte de travez (por babor)
Con mucha escora pero apoyandonos en el bote del compañero, pudimos avanzar rumbo a las Islas por mas o menos 1 km. No usamos la pala, pero la fuerza y postura sobre el kayak para mantener el rumbo y no tumbar, es bastante grande y cansa bastante.
Nuevamente varados pero en este caso hay tan poca agua que se formo un remanso de casi 500 metros y aprovechamos a caminar con los botes a remolque apenas a flote.
Las Dos Hermanas están ya al alcance de las manos, faltan tan solo 3 km para ingresar por el Norte de la isla mayor.
De golpe hay mas agua y nuevamente a los botes. Ingresamos, nos entra bastante agua por la ola y nos ponemos nuevamente los cubrecokpit todos mojados.
Bajamos la cabeza y paleamos sin casi mirar al horizonte, con el afán de hacer los últimos kilometros y llegar de una vez, para descansar y comer.
Con viento totalmente de costado y problemas con el timon de mi bote (se falsearon las mordazas que regulan el cabo dinema) tuve que renegar bastante para no derivar contra la costa rocosa Norte de la isla.
Ya frente a la escollera nos relajamos y festejamos la llegada a tan hermoso lugar, ingresamos con mucho cuidado a la playa rocosa para no golpear los botes y desembarcamos, sacamos los kayaks del algua y revisamos el lugar.
Por suerte no hay nadie, digo por suerte por que somos medio hermitaños y nos gusta la isla para nosotros solos.... jajaja egoista el tipo.
Echamos una mirada el río y se ven corderitos de todos los tamaños, pensar que hace un rato estábamos en medio de ese despelote
Descargamos todo lo pesado de los botes y los llevamos a la parte mas alta de la Isla.
Como ya es costumbre tomamos dos colchones de espuma que hay en la tapera de la isla y armamos las dos carpas debajo de un techo de chapas que hace las veces de comedor.
El clima esta muy inestable y el calor ronda los 34º grados, es realmente insoportable, comemos nuestro almuerzo de milanezas de pollo frias, acompañada con cerveza y disfrutamos un buen rato de la paz del lugar. Luego acomodamos todas las botellas de agua, que todavía siguen congeladas entre diarios y las apilamos junto a toda la comida en una heladera vieja (solo el gabinete) que está en la isla y sirve perfectamente como aislante y conservadora.
Ya con todo ordenado y a resguardo de las ratas, tomamos las colchonetas y nos vamos a dormir un rato bajo la sombra de los árboles serca del río. Navegamos toda la noche por lo que estamos bastante cansados, puse el "despertador" para dentro de dos horas y nos tiramos a dormir la siesta con el ruido del viento y el río, y un calor insoportable.
A las 16 hs nos levantamos y como el cielo esta bastante tormentoso, encaramos la recolección de leña para hacer el asado a la noche.
Encontramos un árbol de madera muy dura, seco y ya bastante trozado, en la parte Norte de la isla, lo cortamos con el machete y juntamos toda la otra leña posible.
En este momento de la tarde hay calma, no hay viento pero se viene una tormenta del lado del Oeste. Se escuchan truenos y comienza un viento Oeste bastante fuerte que inmediatamente rota al Sur y luego al Sud-Oeste, todo en menos de 20 minutos y con lluvia intermitente.
Ya sobre las 18 hs comenzamos con el fuego para el asadito y vemos los árboles altos amacarse para todos lados con el fuerte viento del SO.
Ni que hablar el estado del río, es todo espumita y corderitos.
Degustamos nuestro asadito de cerdo (chuletas y carré) y fuimos acompañados por la presencia de dos ratitas que nos miraban esperando algo para compartir... comida comida..
Estos roedores son muy confianzudos y no se asustan ante nada, se paran a menos de un metro y se sientan con las manitas levantadas como pidiendo comida.
Al principio Clary levanto los pies y los dejo sobre la silla..... cagona..! pero despues de un rato ya no le dabamos importancia a los bichitos y solo nos preocupamos de tener bién cerrados los cierres de las carpas, por las dudas.
En la madrugada se escuchaban motores acelerando, como de motos o algo similar, proveniente de la costa Uruguaya, distante unos 3 km y tambien el sonido de "tamboriles de carnaval" seguramente originados en Carmelo 7 km al Norte.
Esta vez no escuchamos al famoso "perro ladrando " que fuera el misterio de la travesía anterior.
Amanece con alguna lluvia muy leve, las carpas estan protegidas por una "rafia" de 2 por 3m que las cubre completamente.
Desayunamos y se despeja de a poco el Domingo.
Nuestra idea es desarmar todo el campamento, cargar nuevamente los botes y zarpar rumbo a Islote Nicolás Muriega, al Sur de Martin Chico (Uruguay).
Encaramos la navegación al Sur de Dos Hemanas con viento del Sur, en contra como siempre. Mantenemos una velocidad media de 6 km/h con olas de frente y algún corderito que otro, que luego desaparecerían completamente.
La razon es muy simple, esta anunciado mal tiempo para el Lunes (alerta meteorologico), y si vamos a Martin chico, el Lunes tendríamos que hacer el cruce del "Canal del Infierno" para retornar, y no me gusta la idea de encarar tres cruces juntos, con mal tiempo, (Canal del Infierno, Canal BS As y Pozos del Barca Grande).
El resto de la navegación trasncurrió sin mayores novedades,el viento se calmó completamente dejamos pasar dos cerealeros de gran porte, cruzamos por delante de un gran motovelero de madera que subia por el canal y llegamos a las playas de Timoteo a las 12.30, justo para almorzar.
Timoteo esta lleno de kayaks, hay dos grupos que salieron del CRNBE y también están los "dueños de casa" los amigos Uruguayos que ya estaban alistando los botes para emprender el regreso.
Varios grupos y distintos almuerzos, luego a la tarde intentamos llegar a MG por entre los camalotes y juncales que separan las dos isla, como estaba empezando a crecer fuimos por los botes y remamos entre la maraña de plantas hasta llegar a un lugar sin salida.
Luego a la vuelta descubrí la entrada "buena" pero ya el resto de los compañeros estaban regresando y solo no quise mandarme. La idea era dejar los botes amarrados, escondidos en el puerto viejo (Barrio chino) e ingresar a MG para comprar algo fresco para tomar y comer a la noche. Hasta ropa teníamos en el bote para disfrazarnos de turistas y pasar desapercibidos.
Yo por seguridad, llevé el bote a remolque, por si alguien se acalambraba en el medio, de paso me permitió llevar la máquina de fotos y registrar el momento. A la vuelta me lo traje a remolque nuevamente nadando hasta la costa.
Esto es imposible hacerlo cuando el rio esta bajando, en otras ocaciones e visto corrientes que hacen imposible nadar sin ser arrastrado fuertemente rumbo al canal del Infierno. Hoy fue posible, no creo que se repita.
Los atardeceres de Timoteo son siempre espectaculares, estos son algunos de los "habitantes" circunstanciales de la Isla
Por la noche como no podia ser de otra manera, comimos manjares elaborados al disco por los maestros cocineros del CRNBE.
En esta ocasión, la cena del domingo fue comunitaria, todos aportaron algo de la despensa y el resultado fue carne con verduras al disco, que realmente estaba exquisita. El maestro cocinero en este caso fue Gerardo que junto a su inseparable "trapito W" elaboró un plato maravilloso.
Con Clary cocinamos algunos chapati para tener como desayuno el lunes y luego nos fuimos a comer con el resto de la gente.
Para un relato a parte, fué la ceremonia de "casamiento", de una parejita, auspiciada por el "reverendo HDP" que con su sotana, confeccionada con una bolsa negra y un trozo de cinta de enmascarar, destornilló de riza a mas de uno, ni que hablar, las acotaciones del "Boga Alejandro" y los cuentos de Gerardo.
Lunes 08 de la mañana. El ruido a mar es ensordecedor, tenemos viento del Noreste con mas de 25 nudos. Todo se vuela la arena seca pega en los tobillos y las lonas que cubren las carpas, deforman sus estructuras aplastándolas
Nuestra intención de zarpar temprano rumbo al Club, se ve retrasada. El resto del grupo ya tenía planeado de antemano salir a la tarde.
Por momentos estuve a punto de levantar campamento y salir rumbo a Oyarvide, aprovechando el viento del NE usando la vela, pero luego de observar el viento en detalle, no daba para navegar de popa y si en el medio se ponia preor, seguro tendria ola de costado y rafagas.
Ademas se acercaba un cielo negro intenso del Norte, que luego descargó agua durante casi toda la mañana en Timoteo.
Todos desarmaron las carpas y armaron los botes. Solo dejaron un gran plástico negro que cubría a todo el grupo en el almuerzo.
Yo dejé mi carpa con la lona armada y todo el resto del equipo guardado en los botes listos para salir. Me dediqué a descanzar y dormitar, y de a ratos veía como los encargados de los otros grupos miraban preocupados el horizonte...A las 15 hs el viento se calmó de golpe, las olas amainaron y el cielo se aclaro en parte, Esta es la ventana que nesesitamos para el cruce. Fabián pasa al lado mio y me pregunta que pensábamos hacer, le comento que la idea era aprovechar la mejora y salir, por lo que decidimos ir todos juntos.
Desarmamos rapidamente las carpas y en menos de 10 minutos estamos casi todos en el agua.
Primero estaba movido, luego de remar un rato el Rio se calmó bastante y llegando al Canal Petrel ya no teníamos ni viento ni ola.
El Canal Buenos Aires llegando a Petrel tira una barbaridad hacia abajo, remamos siguendo la linea del GPS y vemos como el grueso del grupo es llevado hacia babor por acción de la corriente. Recién llegando al Petrel se dieron cuenta de la deriva y tuvieron que remontar un buén trecho, para reingresar al Canal.
Estamos solos con Clary y el doble de Fabian en el medio del Canal Petrel o Oyarvide, esperando el resto y la corriente a favor es tal que sin remar avanzamos a casi 5 km/h.... se imaginan remando con destino a Martin Garcia.... sin palabras.
La corriente es tan grande que debemos evitar acercarnos a las ramas de los árboles de la orilla, pues si nos enganchamos terminamos revolcados.
A medida que avanzamos veo que el resto del grupo se esta recostando sobre estribor en busca de la margen derecha del Barca lo cual los frena por no tener tanta profundidad.
Llegamos al Miní me arrimo a la boca del Diablito y llamo por radio para ver que es lo que planifica hacer el resto de la gente.
No se ponen de acuerdo, unos quieren seguir por el Diablito, otros remontar el Mini hasta el Canal 4 y otros seguir por el arroyo Diablo.
Les informo de mi desición de seguir por el Diablito, salir a los bajos del temor e ingresar al camping que esta en la boca del Arroyo Diablo. El apuro estaba dado por el estado del tiempo con posibilidad de chaparrones y tormenta eléctrica. Por el Diablito el camino es mas corto y se llega mas rapido y ademas escuche por el canal 72 que el rio estaba empezando a crecer lo que daba corriente a favor en los Bajos del Temor hasta el Arroyo Diablo.
Recorro el Diablito ya con algunos sonidos de descargas eléctricas, pero pasó de largo y llegando al estuario del Plata, estaba todo tranquilo nuevamente.
Remamos los tres kilometros que nos separan de la boca del Arroyo Diablo. La correinte a favor en crecida nos empujo rápido y no divisé a nadie mas detraz nuestro, quedamos solos. Ingresamos al arroyo y a 100 metros de la boca ya se avistaba el camping.
Me sorprendio el ver Kayaks sobre la costa, es totalmente imposible que alguien del grupo haya llegado antes, viniendo por el Arroyo Diablo, y nadie nos paso por el camino de los Bajos.
La situación se aclaró al desembarcar y ver que los botes en la costa pertenecian a integrantes del CRNBE, pero de otra travesia que volvia de Dos Hermanas directamente.
Saludamos a nuestros compañeros ocacionales de camping y al dueño, el cual como siempre nos atendió muy amablemente, armamos las carpas y me dispuse a pescar, mientras Clary tomaba una ducha de agua caliente.
Aproveché a tomar algunas fotos nocturnas con solo el reflejo de las luces de la ciudad sobre las nubes y una luz en un poste del camping. Estas fotos fueron sacadas a las 23.00 hs
Ducha caliente, cena de arroz tipo paella y a dormir. Mañana nos espera el último tramo.
Martes 08.00 de la mañana, nuevamente ruido a mar, pero esta vez estamos en un arroyo que no se mueve nada y esta tapado de árboles. El ruido a mar viene del Rio de la Plata mas exactamente de los Bajos del Temor que están con viento Sudeste fuerte, del orden de los 20 a 25 nudos nuevamente.
A las 09 estamos en el agua, el resto del grupo que estaba acampado también está zarpando a la par nuestra.
Cuando salimos al Rio abierto, el viento pega fuerte en la cara y esta fresco. hay bastantes corderitos y se mueve bastante. Tratamos de evitar derivar sobre los juncos y avanzamos a buen ritmo, tenemos viento de travez (por babor)
Llegando a Punta Moran, tres de los integrantes del otro grupito nos da alcance, y el resto, los otros tres no se ven, vienen mucho mas atras.
Pasando Punta Morán, el rumbo es mas favorable para la vela y juntamos los dos botes, desplegamos una de la velas y salimos disparados para adelante.
De venir renegando con las olas a 5 km/h nos vemos avanzando sin remar a 9 Km/h, al rato miramos para atraz y no vemos a mas nadie. Nos animamos a separar los botes y desplegamos las dos velas cada uno por su lado. Como se puede ver en el track del GPS la velocidad paso a ser de 9 km/h y pasando la pala..... un lujo y ademas barrenando la ola.
Ya ingresando a la zona mas reparada del los Bajos del Temor, entre el Canal Picardo y el Arroyo Chaná, el avance se efectua a 8 km/h con viento por la aleta de babor y una palada bastante relajada. La vela va de costado pero no afecta para nada la estabilidad del bote, pues el viento es franco y sin rafagas. Recorremos todo el Aguaje del Durazno ya solo a pala, en este tramo no hay viento, y luego de un rato estamos ingresando al Paycarbí.
Salimos al Paraná en la boca del Paycarabí a las 11.20 . Hay Sudeste pero en este caso nos ayuda a navegar mas rápido, izamos nuevamente vela, la trimamos para navegar con viento por la aleta y salimos disparados rio arriba. Por momentos nos montamos en la ola y barrenamos a toda velocidad, nos cruzamos y nos divertimos bastante. Parece mentira la forma en que remontamos el Parana sin esfuerzo y jugando con las olas ... que grande la vela... aguante el Windkayak .
Paramos a almorzar en una playita que siempre encontramos desocupada, con muelle nuevo y casa nueva en costrucción, y un montón de camaritas de seguridad en las esquinas... jajaja... El dueño nos debe de estar viendo via internet y dice.... "otra vez estos dos, con los dos botes iguales usando mi playita". Aguante la playita... solo usamos la playita y no tocamos nada..!
A las 13 hs zarpamos nuevamente izamos vela y no la bajamos mas hasta el Club. Casi sin esfuerzo solo pasando la pala y barrenando ola.
Una parte divertida fué cuando cruzamos la boca del La Serna, montados en la ola y con la vela a full nos preguntamos..... saldrá algún barco por la boca del La Serna ?, si sale se la ponemos al medio.... como paro esto..!!
Todo el resto del camino lo navegamos bién por el medio del Parana, la ausencia de barcos y el buén viento, junto a la ola larga, permitieron una divertidísima navegación. Llegamos a las 15 hs al Club.
Track de GPS
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2545241
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